LA HABANA, Cuba. – La Feria Internacional del Libro de La Habana, uno de los eventos culturales de mayor masividad en Cuba, podría abandonar su sede habitual de la fortaleza San Carlos de La Cabaña y desarrollarse en otras locaciones del casco histórico aún por definir.
Detrás de la salida de la Feria de su sede habitual estaría el Grupo de Turismo Gaviota, dependencia del conglomerado militar GAESA. Fuentes a las que tuvo acceso este columnista aseguran que la entidad estaría exigiendo a participantes cubanos y extranjeros el pago de los espacios de exposición y venta en divisas y a precios muy elevados.
La Cabaña ha sido hasta ahora el lugar idóneo para acoger la Feria Internacional del Libro de La Habana por ser una de las pocas instalaciones con capacidad para recibir al numeroso público que asiste a estos eventos.
En sustitución de La Cabaña, la Oficina del Historiador de La Habana habría ofrecido a los organizadores la zona del casco histórico, lo cual, en teoría, obligaría a la dispersión de los lugares de venta y demás actividades, minimizando la participación de los asistentes u obligándolos a realizar largas caminatas por los diferentes puntos.
Para la venidera Feria habrían sido tenidos en cuenta los almacenes San José, ubicados en la Avenida del Puerto, un sitio ocupado en su mayoría por los artesanos cuentapropistas.
Por su amplitud también podría ser utilizados el antiguo Convento de San Francisco y el Palacio del Segundo Cabo, antigua sede del Instituto Cubano del Libro, colindante con la Plaza de Armas y con los parques aledaños al Anfiteatro de La Habana.
Hay varias plazas y parques en la Habana Vieja que también servirían para la Feria del Libro, como la Plaza de la Catedral. Pero ello obligaría al montaje de múltiples carpas, con el riesgo implícito de que eventuales lluvias puedan dañar los libros en exposición.
Los organizadores también habrían pensado en el nuevo recinto ferial de Línea y 18, en el barrio del Vedado, pero su capacidad no es tan grande para acoger a tantos expositores, mucho menos al numeroso público que suele acudir a esos eventos.
El Pabellón Cuba, subsede habitual de la Feria, se encuentra en reparación, por lo que no se espera que acoge el evento este año. Tampoco se descarta que sacar la Feria de La Cabaña obedezca a una estrategia higiénico sanitaria para evitar la aglomeración de tantas personas en un solo espacio.
Hasta hoy apenas existe divulgación de tan importante actividad cultural. Si tenemos en cuenta que estamos a menos de su inicio, todo indica que los planes están en “veremos”.
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