MIAMI, Estados Unidos. – El gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, declaró este miércoles duelo oficial en la Isla por la muerte del papa emérito Benedicto XVI, ocurrida el pasado 31 de diciembre. La medida estará en vigor este 5 de enero, desde las 6:00 a.m. hasta las 12:00 de la noche.
“Nuestro pueblo, con profundo pesar, ha conocido del fallecimiento del papa emérito Benedicto XVI, a quien tuvo la oportunidad de acoger con sentimientos de respeto y afecto durante su visita pastoral a Cuba en el año 2012”, reza la nota publicada en Granma para justificar la declaratoria de duelo oficial.
Asimismo, indica que “Benedicto XVI manifestó afectuosos sentimientos hacia los cubanos y se pronunció contra el bloqueo económico, comercial y financiero que se impone a Cuba, señalando que los esfuerzos por cimentar una sociedad de amplios horizontes, renovada y reconciliada, se afectan cuando las medidas económicas impuestas desde fuera del país pesan negativamente sobre la población”.
Descrito como un teólogo y estadista brillante, y de esencia más conservadora que su predecesor, Benedicto XVI revolucionó la Iglesia Católica en 2013 cuando pidió su renuncia, alegando como motivo su “avanzada edad”. Luego de ocho años como cabeza del Vaticano, Joseph Ratzinger fue el primer Santo Padre en 600 años que se atrevió a dejar sus funciones.
Su renuncia coincidió con un escándalo de abuso sexual en el que se vio implicada la Iglesia Católica. Según la información revelada entonces, Ratzinger en su etapa de arzobispo de Múnich, se habría enterado de casos de abuso sexual que nunca denunció.
Por su parte, el papa emérito respondió que nunca había encubierto a ningún abusador.
Posteriormente fueron filtrados documentos de la Santa Sede que sugerían corrupción, mala gestión y pugnas internas. Estos documentos fueron filtrados a la prensa por Paolo Gabriele, quien fue mayordomo del Vaticano.
Benedicto XVI pidió perdón en varias ocasiones y se reunió con víctimas de esos abusos durante sus viajes a EE. UU., Malta, Reino Unido y Australia.
En Londres admitió por primera vez que la Iglesia no fue suficientemente “vigilante, veloz y decisiva” a la hora de afrontar los abusos sexuales a menores.
Posteriormente, en abril de 2019, Benedicto XVI habló sobre la crisis del abuso sexual en una carta pública. Responsabilizó en parte de este delito a la revolución sexual de la década de 1960 como causa y la liberalización de las enseñanzas morales de la Iglesia.
En marzo de 2012, Benedicto XVI visitó Cuba durante casi tres días y fue recibido por el entonces gobernante Raúl Castro. En sus apariciones públicas evitó alusiones políticas sobre el sistema y el gobierno, aunque pidió “auténtica libertad” para los cubanos.
“Llevo en mi corazón las justas aspiraciones y legítimos deseos de todos los cubanos, dondequiera que se encuentren”, dijo Joseph Ratzinger, quien fue el segundo pontífice católico en visitar la mayor de las Antillas.
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