LA HABANA, Cuba. – Ana María Conde Alemán, la madre del preso político Ramón (Moncho) Pérez Conde, falleció este domingo en su casa debido a un infarto, tres días después de que visitara a su hijo en la prisión de Valle Grande, donde cumple 12 años de privación de libertad.
El régimen permitió a Moncho Pérez, como es conocido el opositor, despedir a su madre en la funeraria del municipio San Miguel del Padrón, en la Calzada de Güines. No obstante, se encontraba custodiado por alrededor de 20 uniformados y esposado con las llamadas “chaquiras”.
Según contó a CubaNet Guillermo Duarte Conde, hermano del opositor, solo pudo estar en el lugar 40 minutos pues en cuanto comenzaron a sonar los teléfonos de las personas presentes en el funeral, los agentes decidieron devolver a Moncho al penitenciario donde se encuentra cumpliendo sentencia por el supuesto delito de propaganda enemiga.
Actualmente, el activista está en huelga de hambre, la cual inició el último día que pudo ver a su madre, de 82 años, con vida.
De acuerdo con una publicación en Facebook del opositor Fabio Corchado, cercano a la familia, “los 12 injustos años de sanción impuestos por el régimen” a Moncho Pérez “por el único delito de sonar una cazuela pidiendo libertad para los presos políticos, atormentó a Ana sus últimos meses”.
“Ana sufrió mucho los últimos meses de vida. Sufría por Moncho. Sufría por Cuba, los cubanos y el destino de esta Isla. Sus días finales en la tierra fueron una total agonía. A pocas personas les he visto el desprecio por el régimen tan marcado en el rostro (…). Ana se fue sin ver sus sueños cumplidos. Se fue sin saborear una porción de justicia”, lamentó.
También contó que Moncho “se despidió de su madre besándola repetida e incansablemente sin soltar una lágrima” pues “no podía darse el lujo de agotar energías” ya que se encuentra “plantado en huelga de hambre desde el día 7 de julio”.
Asimismo, Elianne Martínez Rodríguez, coordinadora del movimiento Embajada Cívica Cubana, del cual forma parte Moncho, declaró a CubaNet que Ana María “se mantuvo hasta el último momento firme contra la dictadura, exigiendo la liberación de su hijo y denunciando todas las barbaridades que se cometen con todos los presos políticos”.
“Ana María no fue nunca una madre a la que le tambaleara el equilibrio ni le temblara la garganta para expresar todo lo que ella expresaba. Mujer firme y admirable”, sentenció.
Recientemente Ana María Conde Alemán denunció en entrevista con CubaNet la “injusta sentencia” de su hijo y exigió su liberación inmediata.
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