Entre derrumbes nos están matando
LA HABANA.-Dormir con un ojo abierto y otro cerrado se ha convertido en un hábito de los “deambulantes” e “ilegales”, como los llaman oficialmente, que
LA HABANA.-Dormir con un ojo abierto y otro cerrado se ha convertido en un hábito de los “deambulantes” e “ilegales”, como los llaman oficialmente, que
EL edificio llevaba en peligro de derrumbe más de 20 años, y hace nueve lo declararon inhabitable
Se calcula que en el lugar hay aproximadamente 800 metros cúbicos de escombros.
Desplomes de cubiertas ligeras, caídas de paredes y escaleras se contabilizan entre los desastres ocasionados por el evento meteorológico.
Casas de cultivo, domicilios, centros laborales, hospitales, plantaciones han quedado devastados.
Pinar del Río ha sufrido el azote de las fuertes ráfagas de vientos que actualmente llegan a 140 km/h.
El museo, que antes fue la casona de los Villalta y de los Zayas Bonnet, lleva décadas abandonado.
“Tuvimos un desprendimiento parcial de una parte de la fachada afectada del edificio”, reconocieron las autoridades de la institución en mesajes de WhatsApp enviados a los estudiantes.
El trágico hecho sucedió en el Cerro, específicamente en la calzada del Cerro, entre las calles Carvajal y Patria.
Una grieta en la fachada se fue ampliando hasta que la estructura se desplomó; no se reportan heridos.
LA HABANA.-Dormir con un ojo abierto y otro cerrado se ha convertido en un hábito de los “deambulantes” e “ilegales”, como los llaman oficialmente, que
EL edificio llevaba en peligro de derrumbe más de 20 años, y hace nueve lo declararon inhabitable
Se calcula que en el lugar hay aproximadamente 800 metros cúbicos de escombros.
Desplomes de cubiertas ligeras, caídas de paredes y escaleras se contabilizan entre los desastres ocasionados por el evento meteorológico.
Casas de cultivo, domicilios, centros laborales, hospitales, plantaciones han quedado devastados.
Pinar del Río ha sufrido el azote de las fuertes ráfagas de vientos que actualmente llegan a 140 km/h.
El museo, que antes fue la casona de los Villalta y de los Zayas Bonnet, lleva décadas abandonado.
“Tuvimos un desprendimiento parcial de una parte de la fachada afectada del edificio”, reconocieron las autoridades de la institución en mesajes de WhatsApp enviados a los estudiantes.
El trágico hecho sucedió en el Cerro, específicamente en la calzada del Cerro, entre las calles Carvajal y Patria.
Una grieta en la fachada se fue ampliando hasta que la estructura se desplomó; no se reportan heridos.