Santa Clara dista bastante de ser la ciudad pretendida por Marta Abreu: ahora es una urbe con edificios patrimoniales apuntalados sin salvación a la vista.
El Teatro La Caridad cumple este 8 de septiembre 139 años, pero está cerrado al público y no existe un vaticinio de cuándo concluirán las obras.
El inmueble, que tuvo entre sus propietarios a Marta Abreu y a José Miguel Gómez, hoy es la sede de la Alianza Francesa en La Habana.
A muchos de los nacidos en Santa Clara comúnmente se les conoce como “pilongos”, un epíteto que proviene de los propios orígenes fundacionales
De aquellos cuatro lavaderos solo quedan tres en pie: uno de ellos fue convertido en vivienda, otro en una sala de teatro y el restante soporta los embates del tiempo y las crecidas del río
Pocas figuras en la historia de Cuba han tenido más impacto en su ciudad natal del que tuvo Abreu en la capital villareña
En Cuba poco se habla de esta insigne cubana, que trascendió en la historia por su dedicación a la independencia y a proteger a los menos favorecidos
Santa Clara dista bastante de ser la ciudad pretendida por Marta Abreu: ahora es una urbe con edificios patrimoniales apuntalados sin salvación a la vista.
El Teatro La Caridad cumple este 8 de septiembre 139 años, pero está cerrado al público y no existe un vaticinio de cuándo concluirán las obras.
El inmueble, que tuvo entre sus propietarios a Marta Abreu y a José Miguel Gómez, hoy es la sede de la Alianza Francesa en La Habana.
A muchos de los nacidos en Santa Clara comúnmente se les conoce como “pilongos”, un epíteto que proviene de los propios orígenes fundacionales
De aquellos cuatro lavaderos solo quedan tres en pie: uno de ellos fue convertido en vivienda, otro en una sala de teatro y el restante soporta los embates del tiempo y las crecidas del río
Pocas figuras en la historia de Cuba han tenido más impacto en su ciudad natal del que tuvo Abreu en la capital villareña
En Cuba poco se habla de esta insigne cubana, que trascendió en la historia por su dedicación a la independencia y a proteger a los menos favorecidos
