Esto parece un campo de concentración, es como ver un documental de lo que no debe pasar”, lamenta un visitante al describir el estado del Zoológico de La Habana.
En la actualidad, al que otrora fuera un importante centro recreativo de La Habana, lo rodea un herbazal. Su reconocido castillito se cae a pedazos.
Inaugurado en abril de 1906, hace años cerró sus puertas, y permanece en total abandono. Hasta las letras del nombre han ido desapareciendo de su fachada.
La discoteca Havana Club, uno de los lugares más concurridos en la década del 90 y uno de los epicentros de la música “dance” en La Habana, hoy está completamente destruida.
Inaugurado en la década de 1940 y remodelado en 1960, actualmente exhibe una piscina de agua estancada, aros de baloncesto oxidados y un deterioro general que contrasta con el esplendor que alguna vez tuvo.
Actualmente, a pesar de toda su historia, las gradas del estadio presentan grietas, la pista de atletismo maleza, y la piscina está vacía, con un gran charco y basura en su interior
Lutgardita, el segundo barrio obrero levantado por Machado en Cuba, contó con importantes fábricas, de las que poco o nada queda en la actualidad
Muy poco queda del lujoso barrio levantado a orillas de playa Tarará, en la primera mitad del siglo pasado
Aunque las autoridades se han “esmerado” por mantener la organización y las ofertas gastronómicas en la instalación, la mayoría de los aparatos no funcionan
En barrios como Lawton, las calles destruidas como en zona de guerra anhelan la visita de cualquier personaje “importante” con la esperanza de ser reparadas alguna vez
Esto parece un campo de concentración, es como ver un documental de lo que no debe pasar”, lamenta un visitante al describir el estado del Zoológico de La Habana.
En la actualidad, al que otrora fuera un importante centro recreativo de La Habana, lo rodea un herbazal. Su reconocido castillito se cae a pedazos.
Inaugurado en abril de 1906, hace años cerró sus puertas, y permanece en total abandono. Hasta las letras del nombre han ido desapareciendo de su fachada.
La discoteca Havana Club, uno de los lugares más concurridos en la década del 90 y uno de los epicentros de la música “dance” en La Habana, hoy está completamente destruida.
Inaugurado en la década de 1940 y remodelado en 1960, actualmente exhibe una piscina de agua estancada, aros de baloncesto oxidados y un deterioro general que contrasta con el esplendor que alguna vez tuvo.
Actualmente, a pesar de toda su historia, las gradas del estadio presentan grietas, la pista de atletismo maleza, y la piscina está vacía, con un gran charco y basura en su interior
Lutgardita, el segundo barrio obrero levantado por Machado en Cuba, contó con importantes fábricas, de las que poco o nada queda en la actualidad
Muy poco queda del lujoso barrio levantado a orillas de playa Tarará, en la primera mitad del siglo pasado
Aunque las autoridades se han “esmerado” por mantener la organización y las ofertas gastronómicas en la instalación, la mayoría de los aparatos no funcionan
En barrios como Lawton, las calles destruidas como en zona de guerra anhelan la visita de cualquier personaje “importante” con la esperanza de ser reparadas alguna vez
