Así viven dos de las madres que se presentaron en la residencia de Díaz-Canel
Dos hermanas cubanas, madres de cinco menores, sobreviven en condiciones extremas en un cuarto improvisado de madera en La Habana; sin respuesta institucional.
Dos hermanas cubanas, madres de cinco menores, sobreviven en condiciones extremas en un cuarto improvisado de madera en La Habana; sin respuesta institucional.
Todavía hay unas 3.461 casas aprobadas para este 2024 que ni siquiera han empezado a construirse.
“Llevo más de siete años pidiéndole al Estado que me ayude”, denunció Juan Osmani Paula Suárez.
Su contribución al mundo intelectual en la provincia de Villa Clara no ha sido suficiente para llamar la atención de las instituciones culturales sobre la difícil situación en que se encuentra.
Según reportes en redes sociales, una mujer resultó herida y tuvo que ser trasladada al hospital.
Hasta el cierre de mayo solo se habían completado 3.579 viviendas, de las 447.375 que el régimen reconoce que se necesitan.
La casa de Yuleymi Valdés López ha sufrido tres derrumbes parciales y, aunque ha pedido ayuda en todas las instancias del gobierno, no obtiene alguna.
“Nos amenazaron con penas de hasta tres años de prisión para que cojamos miedo”, denunciaron las madres cubanas.
Se terminaron 16.065 hogares, cifra que contrasta drásticamente con el déficit habitacional que asciende a más de 856.500 viviendas
La cifra de pisos de tierra asciende a 2.600 y de ese total solo tenían contemplado erradicar unas 300, incluidas unas 100 casas de maestros.
Dos hermanas cubanas, madres de cinco menores, sobreviven en condiciones extremas en un cuarto improvisado de madera en La Habana; sin respuesta institucional.
Todavía hay unas 3.461 casas aprobadas para este 2024 que ni siquiera han empezado a construirse.
“Llevo más de siete años pidiéndole al Estado que me ayude”, denunció Juan Osmani Paula Suárez.
Su contribución al mundo intelectual en la provincia de Villa Clara no ha sido suficiente para llamar la atención de las instituciones culturales sobre la difícil situación en que se encuentra.
Según reportes en redes sociales, una mujer resultó herida y tuvo que ser trasladada al hospital.
Hasta el cierre de mayo solo se habían completado 3.579 viviendas, de las 447.375 que el régimen reconoce que se necesitan.
La casa de Yuleymi Valdés López ha sufrido tres derrumbes parciales y, aunque ha pedido ayuda en todas las instancias del gobierno, no obtiene alguna.
“Nos amenazaron con penas de hasta tres años de prisión para que cojamos miedo”, denunciaron las madres cubanas.
Se terminaron 16.065 hogares, cifra que contrasta drásticamente con el déficit habitacional que asciende a más de 856.500 viviendas
La cifra de pisos de tierra asciende a 2.600 y de ese total solo tenían contemplado erradicar unas 300, incluidas unas 100 casas de maestros.