MIAMI, Estados Unidos. – A raíz de la represión contra las recientes manifestaciones en Nuevitas, Camagüey, el activista cubano Pedro López, uno de los voceros de la familia del preso político Andy García Lorenzo, denunció que la “Policía cubana está sirviendo como ejército privado a una casta”.
Durante las manifestaciones en ese municipio camagüeyano, el régimen procedió a la detención de varios manifestantes y de la joven de 21 años responsable de la varias transmisiones en directo de las protestas. Asimismo, tres niñas cubanas denunciaron que habían sido golpeadas por efectivos de la Policía.
Las autoridades tienen “todo para reprimir”, apuntó López durante una entrevista con CubaNet este martes. “Lo único que funciona en este país es la represión. Funciona al 100% y con una eficiencia probada”, agregó.
Con respecto a la situación de Andy García Lorenzo dijo que el joven se encontraba “bien anímicamente”.
“Él es quien nos da fortaleza a nosotros, pero su situación en la prisión ahora mismo es muy delicada. Está en una cárcel de máxima seguridad y tiene una enfermedad que se llama hipercalciuria”.
“No le están dando su dieta ni sus medicamentos y, además, impiden que accedamos allí con lo que necesita”, lamentó.
También dijo que la situación de toda la familia es “bastante precaria”.
“Esto ha ido escalando. Nos tienen a mí y a Jonatan [su hijo] con procesos abiertos. En mi caso por ‘instigación a delinquir’ y en el de Jonatan por ‘desobediencia’. Ambos tenemos medida cautelar de prisión domiciliaria”.
López también aseguró que, aunque están muy preocupados, no pueden dejar de denunciar la represión desatada por el régimen contra su familia. “Lo que hemos hecho nosotros en este tiempo ha sido denunciar todos los atropellos contra Andy. Nosotros no somos delincuentes”, aseveró.
A mediados de este mes, Roxana García Lorenzo, hermana de Andy, denunció que el joven de 24 años llevaba dos días sin comer y presentaba problemas de salud.
García Lorenzo fue violentamente detenido el 11J del pasado año y sentenciado a cuatro años de privación de libertad por participar en las protestas. Fue excarcelado durante cinco días en el mes de mayo último, y devuelto a prisión, esta vez a un campamento de trabajo para reclusos. El joven se ha negado a trabajar y las autoridades del penal lo mantienen aislado del resto de los encarcelados.
El 23 de julio del presente año, su familia denunció que se encontraba en paradero desconocido luego de que las autoridades carcelarias les comunicaran que el joven había sido trasladado de campamento de trabajo forzado, pero sin más detalles.
Debido a las constantes denuncias y expresiones de apoyo, la familia de Andy García permanece bajo constante acoso por parte de los órganos represivos cubanos. Su cuñado, Jonathan López, y el padre de este, Pedro López, tienen un proceso de investigación abierto por presuntos delitos de “desobediencia” e “instigación a delinquir”, respectivamente. Ambos, junto a su hermana, Roxana García, han sido igualmente detenidos en varias ocasiones y permanecido bajo vigilancia policial.
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