MIAMI, Estados Unidos. – Seis migrantes fueron abatidos a tiros la noche de este martes por soldados mexicanos que los habrían confundido con presuntos delincuentes en una carretera del estado de Chiapas, en el sur del país, según informó la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) de México.
Las autoridades no precisaron la identidad de las víctimas. No obstante indicaron que en el grupo de 33 migrantes había cubanos.
El incidente tuvo lugar en el tramo carretero Villa Comaltitlán-Huixtla, en el estado de Chiapas, e involucró a elementos del Ejército Mexicano. Los migrantes viajaban en camionetas tipo redilas, similares a las usadas por grupos delincuenciales de la región, según la SEDENA.
De acuerdo con esa entidad, el incidente se produjo alrededor de las 20:50 horas cuando el personal militar, al efectuar reconocimientos terrestres, detectó un vehículo tipo pick up que se desplazaba a alta velocidad. Al notar la presencia militar, el vehículo intentó evadir a las autoridades.
Tras escuchar detonaciones, dos de los militares dispararon sus armas y lograron detener una de las camionetas.
Al acercarse, el personal militar encontró a 33 migrantes de diferentes nacionalidades, incluidos cubanos, egipcios, nepalíes, hindúes, pakistaníes y árabes. Cuatro de ellos habían fallecido en el lugar, mientras que otros 12 resultaron heridos. Dos más fallecieron en el Hospital General de Huixtla debido a la gravedad de sus heridas.
La SEDENA confirmó que los 17 migrantes que resultaron ilesos fueron puestos bajo la custodia del Instituto Nacional de Migración (INM). La institución también informó que los dos militares involucrados en el tiroteo fueron separados de sus funciones y se notificó a la Fiscalía General de la República para que realice las investigaciones correspondientes.
De acuerdo con su comunicado, la institución estableció comunicación con la Secretaría de Relaciones Exteriores para coordinarse con las embajadas de los países de origen de los migrantes afectados.
El grupo de activistas Colectivo de Monitoreo Frontera Sur aseguró en un comunicado propio que habían muerto “cuatro hombres adultos, una niña y una joven” a causa de los disparos.
Asimismo, denunció que “las políticas migratorias mexicanas generan un contexto de violencia, precariedad y riesgo para miles de personas, causando graves violaciones de derechos humanos. Les orillan a tomar vías riesgosas, clandestinas y cada vez más costosas, cayendo en redes de trata y tráfico”.
La organización también recordó que hace un año, el 1 de octubre de 2023, se registró un accidente en Pijijiapan, también estado de Chiapas, por el cual murieron 10 migrantes cubanos que eran transportados en un camión.
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