Foto: Ernesto Mastrascusa (EFE).
Este análisis se basa en datos monitoreados por el equipo de Cubalex, que ha documentado de manera sistemática el impacto de la crisis en diversas regiones del país.
La situación energética en Cuba ha alcanzado niveles críticos, afectando múltiples aspectos de la vida cotidiana de la población. Los registros analizados reflejan no solo la magnitud de los apagones y la falta de agua, sino también el impacto social y emocional que generan. A continuación, se detallan los principales hallazgos relacionados con los apagones eléctricos, la crisis del agua potable y las manifestaciones de descontento ciudadano.
1. La crisis energética y sus cifras críticas
Los eventos registrados evidencian un déficit recurrente de generación eléctrica que alcanza, en los momentos más críticos, los 1.768 MW de afectación. Estos apagones prolongados, muchas veces superiores a 24 horas, suelen coincidir con situaciones de alta demanda o con el paso de fenómenos climatológicos como huracanes.
–Promedio de afectación: 1.280 MW.
–Máxima afectación registrada: 1.768 MW.
– Cortes de más de 1.500 MW: Estos casos suelen ocasionar una desconexión completa del Sistema Electroenergético Nacional (SEN), dejando sin servicio eléctrico a vastas regiones del país.
Este colapso energético ha paralizado actividades esenciales, como la atención hospitalaria y la producción de alimentos, generando un deterioro generalizado de las condiciones de vida.
2. Problemas en el suministro de agua potable
La falta de electricidad afecta directamente el funcionamiento de las fuentes de bombeo de agua, lo que ha provocado situaciones alarmantes de desabastecimiento en varias provincias:
–Duración de la afectación: En algunas localidades, los residentes han permanecido más de un mes sin acceso al agua potable.
–Ejemplos críticos:
-En el reparto Van Troi, en Caibarién, la falta de agua se prolongó tanto que una residente protestó desnuda en el balcón de su apartamento.
-En Santiago de Cuba, una avería en la principal conductora dejó sin agua al 80% de la población.
Esta crisis hídrica ha forzado a muchas familias a comprar agua embotellada a precios elevados o a recurrir al agua de ríos y pozos sin condiciones sanitarias adecuadas, exponiéndose a enfermedades.
3. Afectaciones en servicios esenciales
Los hospitales y policlínicos también han sido severamente afectados:
–Hospitales sin generadores operativos: En algunos casos, no hay combustible para mantener los generadores en funcionamiento.
–Ejemplo crítico: En el hospital materno de Boyeros, el servicio eléctrico fue suspendido debido al colapso de un circuito.
–Consecuencias trágicas: Se reportó el caso de una niña fallecida en La Habana por el deterioro de su insulina tras horas de apagón, un reflejo de cómo la falta de energía puede convertirse en una amenaza directa para la vida.
4. Respuestas ciudadanas y manifestaciones de descontento
La población ha respondido a esta crisis con protestas y cacerolazos, especialmente en localidades donde los apagones se han prolongado por días:
–Protestas documentadas en Camagüey, Holguín, La Habana y Santiago de Cuba.
–Cacerolazos y bloqueos de calles: En el municipio Santo Domingo, más de 40 personas participaron en una protesta, gritando consignas en contra del gobierno.
5. El impacto económico y social
La crisis energética también ha generado consecuencias colaterales:
–Producción de alimentos: La falta de electricidad afecta la producción de pan y el funcionamiento de los frigoríficos, lo que ha llevado a la pérdida de alimentos básicos.
–Educación: Se han suspendido clases en varias universidades y centros educativos debido a la falta de electricidad, agua y alimentos.
–Desinformación: En situaciones de emergencia, como el paso de huracanes, la desconexión del sistema eléctrico ha dejado a muchas familias sin acceso a información oportuna, dificultando su preparación.
6. Situación del sector energético
Las termoeléctricas, clave en la generación de energía, han estado constantemente fuera de servicio:
–Unidades en mantenimiento o avería: En algunos momentos, hasta nueve centrales estuvieron fuera de servicio de manera simultánea.
–Ejemplo crítico: La planta Antonio Guiteras, una de las más importantes, ha sufrido paradas frecuentes, contribuyendo a las desconexiones del SEN.
Conclusión
La crisis energética y económica en Cuba refleja un colapso multisectorial con graves consecuencias en la salud, la educación y la vida cotidiana de las personas. Los prolongados apagones y la falta de agua potable han derivado en un clima de tensión social, donde los ciudadanos han expresado su frustración a través de protestas y denuncias.
En Cubalex, hemos creado un foro público para dialogar, compartir experiencias y visibilizar cómo la crisis económica y los cortes de energía afectan los derechos humanos, la educación y la salud. Cada testimonio es clave para entender lo que vive la ciudadanía y fortalecer nuestra labor en defensa de los derechos humanos en Cuba.