
Cuba: rosario de penas
El país se ha convertido en una sarta de lamentos, ácidos porque ni azúcar tenemos para endulzar una tarde o una noche de tristezas, sin electricidad, a oscuras.
El país se ha convertido en una sarta de lamentos, ácidos porque ni azúcar tenemos para endulzar una tarde o una noche de tristezas, sin electricidad, a oscuras.
La “reforma agraria” que ahora celebra el régimen totalitario castrocomunista supuso la eliminación de los latifundios privados que existían en Cuba para transformarlos en un inmenso latifundio de Estado improductivo.
Fuentes oficiales dan cuenta de que el fondo de tierra arable (tierras agrícolas) de Cuba asciende a 6 400 755 hectáreas, de las que solo se encuentran cultivadas 3 120 926 hectáreas. Apenas el 7,2% de estas cuenta con sistemas de regadío.
Fue después de la nacionalización de grandes extensiones de tierra, puestas en manos de empresas estatales y cooperativas, que comenzó el desabastecimiento de productos agrícolas en la Isla
El país se ha convertido en una sarta de lamentos, ácidos porque ni azúcar tenemos para endulzar una tarde o una noche de tristezas, sin electricidad, a oscuras.
La “reforma agraria” que ahora celebra el régimen totalitario castrocomunista supuso la eliminación de los latifundios privados que existían en Cuba para transformarlos en un inmenso latifundio de Estado improductivo.
Fuentes oficiales dan cuenta de que el fondo de tierra arable (tierras agrícolas) de Cuba asciende a 6 400 755 hectáreas, de las que solo se encuentran cultivadas 3 120 926 hectáreas. Apenas el 7,2% de estas cuenta con sistemas de regadío.
Fue después de la nacionalización de grandes extensiones de tierra, puestas en manos de empresas estatales y cooperativas, que comenzó el desabastecimiento de productos agrícolas en la Isla