Nuestra “moneda nacional” es un zombi
El peso cubano no está vivo ni muerto, lo que lo convierte en una especie de zombi de la economía nacional.
El peso cubano no está vivo ni muerto, lo que lo convierte en una especie de zombi de la economía nacional.
Demasiado pronto llegará el día cuando las tarjetas de MLC se nos olvidarán en una gaveta, así como de vez en cuando, en ese mismo cajón, nos aparecen monedas o billetes de CUC inservibles, para recordarnos que hemos vivido en un ciclo perpetuo de promesas, engaños.
Las tiendas que venden artículos en MLC solo ofertan aceite de oliva importado, a precios alcanzables para los que reciben grandes remesas o los funcionarios del Gobierno.
“La situación generada por la pandemia impidió que un número considerable de personas pudiera efectuar esa operación en los plazos de tiempo establecidos”, indican las autoridades cubanas
El Banco Central de Cuba estableció como nueva fecha el 28 de diciembre próximo
El 31 de marzo próximo automáticamente los sistemas bancarios convertirán saldos en CUC a CUP con la tasa de cambio oficial de 1 CUC x 24 CUP
Las cuentas en pesos convertibles de ahorro a la vista, depósitos a plazos fijos y certificados de depósitos de las personas naturales podrán mantenerse en CUC hasta el 31 de marzo de 2022
El CUC quedará en las memorias del cubano, en las memorias de los últimos 30 años, que son las memorias de la escasez, del desabastecimiento.
Los cubanos deben saber que en este momento el problema no es el CUC, sino el CUP, una moneda débil, con unos fundamentales desequilibrados y que tiene un escaso (nulo) atractivo a nivel internacional
Dieciséis años después de que Fidel Castro anunciara con bombos y platillos el CUC, la moneda ha sido declarada “non grata”, los comercios se niegan a recibirla y los depósitos bancarios mutarán en pesos devaluados.
El peso cubano no está vivo ni muerto, lo que lo convierte en una especie de zombi de la economía nacional.
Demasiado pronto llegará el día cuando las tarjetas de MLC se nos olvidarán en una gaveta, así como de vez en cuando, en ese mismo cajón, nos aparecen monedas o billetes de CUC inservibles, para recordarnos que hemos vivido en un ciclo perpetuo de promesas, engaños.
Las tiendas que venden artículos en MLC solo ofertan aceite de oliva importado, a precios alcanzables para los que reciben grandes remesas o los funcionarios del Gobierno.
“La situación generada por la pandemia impidió que un número considerable de personas pudiera efectuar esa operación en los plazos de tiempo establecidos”, indican las autoridades cubanas
El Banco Central de Cuba estableció como nueva fecha el 28 de diciembre próximo
El 31 de marzo próximo automáticamente los sistemas bancarios convertirán saldos en CUC a CUP con la tasa de cambio oficial de 1 CUC x 24 CUP
Las cuentas en pesos convertibles de ahorro a la vista, depósitos a plazos fijos y certificados de depósitos de las personas naturales podrán mantenerse en CUC hasta el 31 de marzo de 2022
El CUC quedará en las memorias del cubano, en las memorias de los últimos 30 años, que son las memorias de la escasez, del desabastecimiento.
Los cubanos deben saber que en este momento el problema no es el CUC, sino el CUP, una moneda débil, con unos fundamentales desequilibrados y que tiene un escaso (nulo) atractivo a nivel internacional
Dieciséis años después de que Fidel Castro anunciara con bombos y platillos el CUC, la moneda ha sido declarada “non grata”, los comercios se niegan a recibirla y los depósitos bancarios mutarán en pesos devaluados.