Cubalex alerta sobre la grave situación del preso político Eider Frómeta Allen, recluido en la prisión de Boniato, en Santiago de Cuba, quien enfrenta un deterioro crítico de salud y represalias sistemáticas por parte de las autoridades penitenciarias.
Riesgo crítico para su vida
Desde el día de ayer, Eider Frómeta presenta una crisis de hipertensión arterial que lo dejó al borde de un infarto, llegando a sentir que perdía el conocimiento. Gracias a la solidaridad de otros reclusos del destacamento #13, pudo ingerir amlodipino e hidroclorotiazida para controlar parcialmente la presión.
A pesar de ello, no ha recibido atención médica y permanece con la presión elevada, sin poder dormir y en condiciones críticas. Eider afirma que la negación de asistencia constituye una represalia por sus denuncias previas contra las autoridades penitenciarias.
Su madre informó que no puede entregarle medicamentos hasta el próximo lunes, único día autorizado por la prisión para este procedimiento.
A esta situación se suma la suspensión del depósito de jabas, medida que hasta ahora permitía a los reclusos recibir alimentos 15 días después de cada visita para paliar el grave estado de desnutrición en la prisión. Según las autoridades, la restricción se adoptó tras el hallazgo de sustancias prohibidas en algunas jabas, pero su efecto inmediato será un deterioro aún mayor de la alimentación y las condiciones de vida de los internos.
Represalia previa: suspensión de visita familiar
El pasado 21 de agosto, a Eider Frómeta le fue negada de manera arbitraria la visita familiar que le correspondía. Según la información recibida por Cubalex, el mayor Humberto Garcés , jefe de Orden Interior, le prohibió ver a su familia y le dijo que solo podría tener visita “cuando a él le diera la gana”.
Ante esta violación de sus derechos, Eider protestó y fue golpeado y arrastrado hasta el destacamento. Mientras tanto, su madre, su hermana y su esposa esperaban poder verlo, pero también se les negó ese derecho.
Cabe destacar que Eider no tiene sanciones ni medidas disciplinarias que justifiquen esta restricción. La suspensión de las visitas constituye un castigo cruel y arbitrario, que lo aísla de su familia y lo priva de alimentos, artículos básicos y del apoyo esencial para su supervivencia en prisión.
Cubalex exige a las autoridades cubanas:
-Garantizar atención médica inmediata y adecuada a Eider Frómeta Allen.
-Poner fin a las represalias contra los presos políticos en Cuba.
-Restituir las visitas familiares y las medidas que permitan a los reclusos acceder a alimentos y medicinas, condiciones mínimas para la protección de su salud y dignidad.