Gerardo Díaz Alonso, manifestante del 11 de julio y preso político, falleció el 17 de octubre en la prisión de máxima seguridad de Canaleta, en Ciego de Ávila, tras sufrir un infarto, según reportes en redes sociales.
Díaz Alonso, de 35 años y padre de dos hijos, cumplía una condena de 14 años, en condiciones inhumanas y privado de todos sus derechos y beneficios penitenciarios, por su participación en las manifestaciones del 11 de julio de 2021 en Cárdenas, Matanzas.
Las muertes en custodia en Cuba evidencian una crisis sistémica de derechos humanos en el sistema penitenciario. Las personas privadas de libertad enfrentan condiciones inhumanas, como hacinamiento, falta de atención médica adecuada, torturas y tratos degradantes.
Entre enero de 2022 y enero de 2024, Cubalex documentó 56 muertes bajo custodia estatal, revelando un patrón persistente de violaciones agravado por la falta de investigaciones independientes y transparentes, lo que perpetúa la impunidad.
Desde Cubalex, hacemos un llamado urgente a que se investiguen exhaustivamente las circunstancias de la muerte de Gerardo Díaz Alonso.